Rodamos entre un torbellino de deseo
un silencio recorrió la habitación
nos miramos culpables
y la cintura de tu nube
turbó mi horizonte
tú...bosque desenfrenado
de rabiosa mirada
te apareciste en mis ensoñaciones
te deslizaste como gata en noche oscura
las sábanas nos cubrían
y se deslizaban por nuestra piel
como serpientes de agua
así, debajo de ellas
inundámos de océano lujurioso
la madrugada impetuosa